Tipos de membranas para techos

Te contamos cómo impermeabilizar techos y cuáles son las diferentes opciones de membranas que podés usar para dejar tu casa bien protegida.

Las cubiertas y los techos son las partes de una casa que están más expuestas a la incidencia de los factores climáticos, algo que, con el tiempo, afecta su buen estado y su función. Para prevenir o solucionar inconvenientes que deriven en goteras y manchas de humedad, es fundamental realizar periódicamente tratamientos impermeabilizantes. Hay varios tipos de membranas para techos que podés usar en esta tarea.

Tipos de membranas para techos

Una membrana es un elemento que, además de darle a un techo toda la impermeabilidad que necesita, le permite resistir las exigencias físicas, químicas y mecánicas provocadas por la acción climática.

Al momento de optar entre los diferentes tratamientos impermeabilizantes, es preciso tener en cuenta varios aspectos para elegir el más conveniente en cada caso. Tenés que evaluar desde el material y el diseño del techo -no es lo mismo si es a dos aguas, con buena caída o plano- hasta las características climáticas donde vivís. En el mercado podrás encontrar distintos tipos de membranas:

Membrana asfáltica para techos: es una barrera impermeabilizante preelaborada conformada por varias capas de materiales que le otorgan resistencia y elasticidad.
Membrana líquida para techos: es un producto que detiene el agua e impide su paso reduciendo la porosidad del concreto, llenando las filtraciones y aislando la humedad del material.
Membrana para techo de chapa: para este tipo de cubiertas se recomienda el uso de una Membrana Asfáltica elaborada con Asfalto Plástico y con revestimiento de aluminio compuesto. También se puede usar algún tipo de pintura especial para chapa galvanizada.

Veamos las características y cualidades de cada tipo de membrana para techo.

Membrana asfáltica para techos

La membrana asfáltica es un elemento hidrófugo formado por varias capas de materiales que conforman en conjunto un sistema de impermeabilización único. Está compuesta por 3 elementos básicos: la imprimación, la capa asfáltica y la terminación o revestimiento.

La imprimación debe realizarse previamente a la colocación de la membrana preelaborada. Es una pintura asfáltica que se aplica sobre el techo para luego adherir las membranas a ella.
La capa asfáltica es la parte más importante de la membrana preelaborada, la que le otorgará sus condiciones de resistencia física y mecánica. En este sentido, las membranas de espesores totales superiores a los 3,5 mm y de peso total mínimo 4 kg/m2 son las que aseguran un buen funcionamiento.
El revestimiento es la última capa y tiene como función proteger al cuerpo asfáltico de la membrana de las acciones climáticas y, en ciertos casos, permitir el tránsito peatonal.

Existen 3 tipos de membranas asfálticas que se diferencian entre sí por las características del revestimiento que poseen:

Membranas con revestimiento de Aluminio (No transitables): el film de aluminio que recubre este tipo de productos aumenta la resistencia mecánica de la membrana ante las condiciones climáticas extremas. Además, extiende la vida útil del producto y brinda mayor seguridad al sistema de impermeabilización. Si bien es flexible, puede romperse fácilmente por lo que no es apta para el tránsito.
Membranas con revestimiento de Geotextil (Transitables): el geotextil es una malla compuesta por fibras sintéticas principalmente de polipropileno y poliéster. Posee además resinas que aumentan sus propiedades mecánicas y su adherencia a la capa asfáltica. Otorga a las membranas asfálticas óptima resistencia al impacto, al punzonado y a la abrasión producida por el tránsito peatonal. Una vez aplicada, se debe pintar la superficie con membrana líquida.
Membranas normales sin aluminio: están desarrolladas para ser colocadas debajo de la carpeta de cemento y arena sobre la que luego se instalará algún tipo de piso o terminación. En caso de que queden a la intemperie, necesitan una protección adicional, la cual dependerá del uso que se le dé a la terraza dónde fue aplicada.

Membrana líquida para techos

Es uno de los mejores tratamientos para impermeabilizar cubiertas. Su aplicación es muy sencilla, ya que se trata de un tipo de membrana que se coloca con pincel o rodillo y, al secarse, forma una espesa capa elástica de gran capacidad hidrófuga.

La elasticidad es uno de sus aspectos más destacables, ya que, al ser las cubiertas el elemento de la casa más expuesto al frío o a los rayos de sol, sufren una dilatación mayor que otros sectores de la vivienda.

Los cambios y movimientos imperceptibles causados por la dilatación terminan provocando fisuras y marcas por donde se producen filtraciones. La elasticidad de este material permite entonces que la membrana se adapte a esas transformaciones y selle completamente el techo.

Los fabricantes de productos impermeabilizantes han desarrollado varias de estas membranas a partir de numerosos compuestos. Veamos algunos de los más recomendables:

Membrana líquida Sinteplast: esta marca ofrece distintas opciones que varían según los materiales con los que están elaboradas, pero la que destaca es la que está hecha con un recubrimiento acrílico diluible en agua. Es fundamental aplicarla con el espesor recomendado para que forme una película sumamente elástica, resistente a nivel mecánico y en relación a los factores climáticos. Tiene una vida útil de 10 años, lo cual la hace una elección eficiente en términos económicos. Funciona a la perfección tanto en cubiertas planas e inclinadas y, como viene en distintos colores, puede aplicarse inclusive en terrazas que estén a la vista.

Membrana Sika Sikafill Térmica: este producto está reforzado con microesferas de fibra que mejoran la capacidad de aislamiento térmico y recubren fisuras. A esta aislación también ayuda el hecho de que, una vez seca, conforma un recubrimiento impermeable de alta reflectividad de la radiación solar. Entre sus bondades se destacan también la facilidad de limpieza, la rapidez de aplicación y la posibilidad de aplicado en frío.
Plavicón fibrado: es un impermeabilizante acrílico elaborado con fibras incorporadas en base acuosa, formulado en base a polímeros reticulantes de curado por efecto UV (ultravioleta). Forma una membrana armada de gran elasticidad y gran resistencia a la abrasión, lo que prolonga su vida útil.
Membrana líquida Venier: esta marca fabrica un recubrimiento impermeabilizante de secado al aire formulado con caucho, filtros UV y fibras incorporadas que resulta sumamente efectivo. Forma una película impermeable y elástica. Su alto contenido de sólidos y su gran consistencia permiten lograr películas de alto espesor, que se pueden aplicar sobre superficies horizontales y sobre los paramentos verticales con excelentes resultados. Una gran ventaja es que es totalmente transitable.

Cómo aislar un techo de chapa

Impermeabilizar un techo de chapa puede parecer una tarea complicada, pero, en realidad, podemos usar alguno de estos productos y aislar perfectamente nuestra casa protegiéndola de filtraciones y humedad. Te contamos cómo hacerlo:

Revisión y limpieza: el primer paso es limpiar todo el techo hasta que no queden manchas de grasa, polvo, hongos o humedad. Además, hay que verificar que se encuentre en buen estado, sin abolladuras o desniveles.
Imprimación: efectuar la imprimación de la superficie con Pintura Asfáltica de base solvente para garantizar que la membrana se adhiera a la chapa.
Secado: ahora se debe esperar un tiempo para dejar secar la imprimación y poder trabajar sobre ella.
Colocación de la membrana: a continuación, se puede proceder al pegado completo de la membrana asfáltica (con soplete), procurando copiar con la membrana las formas de la superficie. De esta manera se asegura la resistencia y durabilidad de la impermeabilización.
Sellado: para concluir, se deben pintar las juntas con pintura asfáltica aluminizada para proteger el asfalto y evitar su deterioro prematuro.