Cómo limpiar la plancha y dejarla como nueva

A medida que la usamos y con el paso del tiempo, la plancha se puede deteriorar. Es uno de los electrodomésticos más usados en los hogares y es importante que funcione correctamente para no arruinar nuestras prendas. Es algo que puede ocurrir cuando quedó algún resto de tela adherido o cuando tiene alguna mancha. Por suerte, existen unas cuantas soluciones caseras muy sencillas para prevenir problemas. Compartimos algunos consejos sobre cómo limpiar la plancha y dejarla como nueva.

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Tipos de plancha de ropa

Antes de aprender cómo limpiar la plancha de ropa, primero hay saber qué tipo de electrodoméstico tenemos en casa, porque para cada uno debemos aplicar una receta diferente. En general, los modelos son:

• Plancha a vapor.
• Plancha con base de teflón.
• Plancha con base de cerámica.
• Plancha sin base recubierta.

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Cómo limpiar la plancha a vapor

Estas planchas tienen en su base muchos agujeros pequeños, que permiten que salga el vapor necesario para lograr un planchado perfecto. El problema es que suelen taparse o ensuciarse, acumulando sarro y suciedad. ¿Cómo limpiarlas? El detergente para vajillas es una gran solución:

• Mojá un hisopo en una emulsión de detergente y agua tibia y pasalo por cada agujero de la base. Si es necesario, repetí el proceso y luego limpiá con un paño húmedo con agua. Secala bien para terminar.

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Cómo limpiar una plancha de teflón

Las planchas recubiertas de teflón son las más usadas, ya que la base es antiadherente. De todos modos, esto no garantiza que no se ensucien o se quemen un poco. El jabón líquido para ropa es un recurso perfecto para dejarla como nueva.

• El objetivo es limpiar la plancha sin rayar la base para evitar que pierda sus propiedades antiadherentes. Para eso, prepará una emulsión con agua tibia y una medida pequeña de jabón líquido para ropa. Mojá un paño con la preparación y limpiá la base de la plancha. Enjuagá con un paño húmedo  y secala bien. Vas a ver que queda lista para usar.

Cómo limpiar una plancha de cerámica

No es nada difícil. También en este caso podés recurrir a elementos que hay en todas las casas. Sólo es cuestión de aprender cuáles son y cómo usarlos. Tomá nota:

Con sal

Encendé la plancha para que se caliente. Mientras tanto, colocá sobre la mesa una tela gruesa y limpia y esparcí sobre ella una capa gruesa de sal. Cuando la plancha esté caliente, frotala sobre la sal con movimientos de arrastre hasta que las manchas desaparezcan. Cuando la plancha esté fría, limpiala con un paño húmedo para remover los restos de sal y suciedad.

Con vinagre blanco

Esta receta es indicada para manchas más rebeldes. Calentá un poco de vinagre blanco, mojá un paño y pasalo por la base de la plancha, frotando con fuerza hasta que veas que desaparecen. Si aún así no salen, podés agregar una cucharadita de bicarbonato de sodio. Cuando la plancha quede limpia, repasá con un paño humedecido en agua y secala bien antes de volver a usarla.

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Para limpiar una plancha quemada

Si tuviste un accidente y la plancha se quemó, no te preocupes. Estas son las opciones que tenés para limpiarla y que quede como nueva.

Con vela

Este truco es un poco más complejo, pero es muy efectivo. Calentá la plancha y frotá una vela contra la base, de modo que se le pegue la cera derretida. Retirá los restos de vela con un paño grueso húmedo, pasando varias veces si es necesario. Al retirar la cera, la suciedad desaparecerá de la base.

Con pasta dental

Otro truco sencillo para limpiar tu plancha quemada: pasá por la base de la plancha -caliente pero desenchufada- una capa de pasta de dientes. Frotá bien con un paño húmedo hasta sacar toda la plasta y, con ella, los restos de suciedad. Luego encendé la función vapor y dejá que, durante este proceso, salgan los restos de pasta que pudieran haber quedado en los agujeros. Volvé a limpiar la plancha con un paño húmedo.

Cómo limpiar una plancha sin base recubierta

En este caso, es importante tener cuidado de no dañarla con productos abrasivos. Este es el mejor recurso:

Con pulidor de metales

Recordá que esta opción sólo sirve para las planchas que no tienen la base recubierta. Es súper simple: frotá un paño embebido con el pulidor hasta que salgan las manchas y quede impecable. No te olvides de terminar repasando con un paño humedecido en agua tibia.

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Algunos datos que es bueno remarcar

• Cuando limpies una plancha, ponela a calentar pero asegurate de desenchufarla al momento de limpiarla. Nunca lo hagas si está enchufada.
• Cuando dejes de usarla, esperá a que se enfríe antes de enrollar el cable y guardarla.
• Si tu plancha es a vapor, vaciá el depósito de agua antes de guardarla.
• Si, por accidente, quemás una prenda, sacá rápidamente los restos de tela adherida en la plancha y limpiala siguiendo los consejos que te dimos.

Con estos consejos vas a poder alargar la vida útil de tu plancha y asegurarte de que tus prendas siempre luzcan prolijas y como recién salidas de la tintorería.

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