Hay formas de sentirnos mejor en nuestra propia casa sin necesidad de comprar cosas caras o invertir tiempo y dinero en decoraciones que más pensadas para la foto que para el disfrute personal. En tiempos en que todo está pensado para mostrarlo en redes, hay una tendencia que busca todo lo contrario: pone el eje en la intimidad, la comodidad, el uso personal. Se llama homefullness e invita a generar en nuestros hogares lugares más cercanos al placer de quienes habitamos los espacios, creando “barreras” que nos alejen del estrés y la exigencia.
Se trata de utilizar elementos livianos y sencillos para hacer del interior de nuestros hogares un paisaje más relajante y cálido, donde la armonía nos alejen del ruido exterior. Según las claves del homefullness, la sensación de placer se desvanece en un lugar desordenado y cargado de tensiones y emociones calladas.
El homefullness se trata de un término nuevo, concebido por la escritora Tiffany Watt Smith, y se refiere a la combinación de una sensación de alivio, con el sentimiento de pertenencia y el sostén. En lo que es decoración, propone simplificar el diseño y poner el foco en el disfrute y el calor del hogar.
El foco no está en los objetos ni en el estilo: puedes elegir el estilo de decoración que quieras, pero debes hacerlo de forma simplificada, sin recargar espacios. No estamos sugiriendo que seas minimalista si no es lo que te agrada, pero lo que sí recomienda el homefullness es apuntar a lo que denomina “limpieza visual“, teniendo en cuenta que eso otorga la oportunidad de experimentar placer al abrir la puerta de casa.
Justamente, la clave de la decoración que promueve el homefullness es crear espacios que ayuden a lograr un sentimiento de paz y relajación, ambientes que nos alejen del estrés.
Según los expertos, homefullness es una palabra que significa “la sensación de seguridad, control y confianza que conlleva tener un lugar al que llamar hogar”. Se trata de esa alegría y el “mimo” que respalda la frase “hogar, dulce hogar”, ese espacio en el que podemos ser nosotros mismos, tener privacidad y nuestros objetos más preciados, así como los mejores recuerdos y personas amadas.
Para ello, esta tendencia pretende potenciar los sentimientos alrededor del bienestar, la relajación, la tranquilidad y la seguridad dentro de los espacios de la vivienda. Se trata de convertir el hogar en un remanso de paz y comodidad, que nos permita liberarnos del estrés y sentirnos totalmente a gusto y cómodos.
Se trata de generar lugares donde prime la comodidad y la armonía sobre los “espacios de revista”, más pensados para mostrar que para vivir.
El homefullness busca sacar la mejor versión de nuestras habitaciones y livings, entendiendo que el interior de nuestra casa dice mucho sobre nuestra vida cotidiana: sobre cómo nos manejamos, cuánto tiempo le dedicamos a nuestros hogares, qué tan estresante es nuestra rutina, etc.
Muchos creen que reorganizar y redecorar nuestros hogares no genera realmente ningún cambio, sin embargo, el efecto que crea el homefullness es tan relajante como la sensación de llegar a casa luego de un largo viaje. Tener todo ordenado y organizado se siente tan bien a la vista que permite desestresarnos de la rutina diaria.
Nuestro hogar es el lugar en el cual más tiempo pasamos, de ahí la importancia de tener un ambiente en el que nos sintamos cómodos y representados, con objetos o detalles agradables a la vista.
Homefullness se trata de una palabra que combina la sensación de alivio con el sentimiento de pertenencia y del apego
Esta tendencia se basa en decoraciones para el hogar poco complejas, con estructuras lisas y muebles simples; todo con el objetivo de desestresarnos y permitirnos descansar en un ambiente relajante: nuestro propio hogar.
¿Existe un manual para tener la casa perfecta a base de esta nueva tendencia o dependerá de los gustos de cada persona? Si bien las personas pueden elegir sus propias formas de decorar sus hogares, el homefullness trata de simplificar lo que ya hay en nuestra casa y hace todo menos complicado.
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Al hablar de simplificar nos estamos refiriendo a disminuir la cantidad de objetos en nuestro campo visual, facilitando la estadía con materiales simples y lisos. El objetivo es hacer que el interior del hogar no esté sobrecargado con decoraciones ni adornos innecesarios, sino más bien que transmita una apariencia armoniosa y limpia.
Es por eso que esta tendencia promueve el uso de materiales, nobles tales como los algodones, las maderas sin tratar y tintes que nos reflejan las cosas hechas a mano.
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Esta tendencia, como dijimos, entiende al desorden como algo complejo, poco armonioso y contraproducente, que nos impide alcanzar el sentimiento de satisfacción. El caos hogareño, la suciedad, hace asociar a nuestra casa con un espacio estresante.
Otra de las cosas que se necesita hacer para ser parte de la tendencia del Homefullness es optar por muebles suaves, es decir, muebles con formas redondas. El hecho de que un sillón o una mesa sean redondos le aporta más calidez al ambiente y hace que nos relajemos.
Los lugares que tienen estos objetos con formas redondas logran adquirir una enorme sensación de confort y son bastante agradables a la vista. La estructura de las mesas y los sillones ovalados adoptan formas orgánicas que nuestro cerebro asocia rápidamente con elementos naturales, creando una agradable sensación y unas irrefrenables ganas de descansar sobre ellos.
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Además, su redondez transmite un mensaje de ergonomía y comodidad que invita a pasar horas disfrutando de sus sinuosas líneas. Si se los combina con tejidos de colores claros y empolvados, lograremos obtener una mayor sensación de ligereza.
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