De acuerdo a la Organización Mundial de la Salud, una cuarta parte de todos los adultos manifiestan haber sufrido maltratos físicos de niños; una de cada 5 mujeres y 1 de cada 13 hombres declaran haber sufrido abusos sexuales en la infancia; y se calcula que cada año mueren por homicidio 41.000 menores de 15 años.
No podemos quedarnos de brazos cruzados frente a esta realidad. El maltrato en la infancia puede tener consecuencias muy graves en el desarrollo mental y físico del niño. Las secuelas pueden durar toda la vida. Si prestamos atención podemos prevenir algunos casos o evitar que sigan sucediendo.
El maltrato en la infancia puede tener consecuencias muy graves en el desarrollo mental y físico del niño.
Según la OMS, el maltrato infantil “se define como los abusos y la desatención de que son objeto los menores de 18 años, e incluye todos los tipos de maltrato físico o psicológico, abuso sexual, desatención, negligencia y explotación comercial o de otro tipo que causen o puedan causar un daño a la salud, desarrollo o dignidad del niño, o poner en peligro su supervivencia, en el contexto de una relación de responsabilidad, confianza o poder”.
La exposición del niño a la violencia de pareja también se incluye a veces entre las formas de maltrato infantil.
Lo primero que debemos hacer es creerle a quienes denuncian violencia en su hogar. Cuando los menores deciden contar lo que les está pasando, es habitual que los adultos no crean en su palabra. Esto hace que el chico entienda que debe guardar silencio y aceptar su realidad como normal.
Hay ciertos indicadores físicos y de comportamiento a los que tenemos que estar atentos. En el niño podemos observar la reiteración de moretones, el descuido sostenido en la ropa o en la higiene, conductas antisociales y retrasos en el desarrollo.
Si creemos que un menor puede estar siendo víctima de abusos sexuales, tenemos que prestar atención a la conducta sexual explícita, juegos inapropiados para su edad evolutiva o masturbación compulsiva.
Sin embargo, las señales pueden ser confusas y es normal que necesitemos más información sobre el tema.
Las señales pueden ser confusas y es normal que necesitemos más información sobre el tema.
Si creemos que somos testigos de un caso de maltrato infantil debemos pedir ayuda. Hay expertos que pueden asesorarnos y guiarnos en la contención del niño en peligro.
En la ciudad de Buenos Aires, existe una línea para denunciar maltrato infantil por Whatsapp -15-70377037- y una línea telefónica -08001227376-, que atiende de lunes a viernes de 9 a 16. En la provincia de Buenos Aires se puede llamar a la línea gratuita 102 y a nivel nacional existe la línea 137 para atención de víctimas de violencia familiar.
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