Síndrome de Fortunata: qué es y por qué se lo asocia a la China Suárez

Tras el escándalo mediático entre Icardi, Nara y la China Suárez hay quienes justifican la conducta de la actriz con el ‘Síndrome de Fortunata’.
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La semana pasada ocurrió un escándalo mediático entre Wanda Nara, Mauro Icardi y la China Suárez. El origen del problema se dio tras un aparente affaire de la actriz argentina (Suárez) con el futbolista Icardi que se encuentra casado desde hace años con Nara.

Desde hace días se alega que Eugenia Suárez es la tercera en discordia y las críticas online que se le hacen están relacionadas con que no es la primera vez que se encuentra entrometida en un escándalo amoroso. Lo mismo le pasó con Benjamín Vicuña y Carolina ‘Pampita’ Ardohain y con Nicolás Cabré y Eugenia Tobal. Entonces la pregunta que circula es, ¿será que tiene un problema psicológico?

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¿Qué es el síndrome de Fortunata?

Con la mediatización de los chats y distintas versiones de los hechos se comenzó a hablar de que la actriz podría padecer el síndrome de Fortunata. Este es una especie de dependencia emocional que desarrollan algunas mujeres hacia los hombres casados. De todas maneras, este síndrome es un patrón conductual que se repite y no un trastorno u enfermedad.

Además, todavía no se constató la versión oficial de lo que ocurrió en este triángulo amoroso e incluso en su descargo, Suárez dio a entender que fue víctima de un malentendido dónde el futbolista le dio a entender que él se encontraba separado de la mediática. Tras su respuesta al escándalo, se desató la polémica sobre si se está analizando un hecho con una mirada basada en un sistema patriarcal que puede tener en ciertas subjetividades hacia las mujeres y una tendencia a no culpar al hombre de la situación.

¿De dónde proviene el nombre del síndrome?

Viene de la novela de Benito Pérez Galdós, ‘Fortunata y Jacinta’. Esta obra fue escrita en el siglo XIX y fue luego llevada a la pantalla grande. Justamente, los personajes de la novela tienen rasgos psicológicos muy especiales por lo que de allí se la relaciona con esta tendencia femenina a desear estar con hombres casados

La novela trata sobre un matrimonio que se ve irrumpido por Fortunata que se convierte con el tiempo en la amante de Juanito Santa Cruz (personaje principal). Al tiempo Fortunata se casa con un señor llamado Maximiliano pero se sigue encontrando a escondidas con Juanito Santa Cruz, aquí se demuestra el patrón conductual que sería similar al de la China Suárez.

Asimismo, por lo que se conoce de este síndrome hay más casos de mujeres a las que les sucede. Pero ¡atención! el síndrome de Fortunata también ocurre en hombres. En estos casos, hay psicólogos que estiman que los pocos casos en hombres se debe a que está más naturalizado en la sociedad la infidelidad por parte del hombre.

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9 características para reconocer el Síndrome de Fortunata

Hay ciertos elementos de la conducta y la personalidad que reinciden en todas las personas que se ven afectadas por esta tendencia psicológica, entre ellos:

  1. Tener un sentimiento de amor intenso, repetido y persistente hacia un hombre casado con otra mujer.
  2. Creer que la vida no tiene sentido si no está con ese hombre que se encuentra comprometido.
  3. Desinterés en cualquier relación amorosa que no sea la establecida con ese hombre.
  4. Disposición para abandonar todo o asumir cualquier riesgo siempre que se lo pida ese hombre.
  5. Obstinación con que es ella la que tiene más derecho a estar con el hombre aunque no se la reconozca social o legalmente.
  6. Esta última creencia se refuerza si ha tenido hijos con el hombre e incluso, en el caso de no hacerlo demuestra deseos intensos de tenerlos.
  7. Fuertes sentimientos de odio, desprecio, celos y similares hacia la mujer legítima socialmente del hombre.
  8. Defender la relación en base a la creencia de que el amor es el responsable, y justificación ante sí misma y ante los demás de la continuidad de la relación por esta razón.
  9. Constante idealización de un futuro junto a este hombre y de la separación de su esposa para así convertirse en la mujer que tenga la relación exclusiva.

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