Más de 80.000 personas han compartido en los últimos días a través de sus redes sociales la sincera reflexión que una pontevedresa dejó expuesta en la sala de espera de un centro médico de Marín en Pontevedra, España.
La carta, que fue fotografiada por otra usuaria y se hizo viral en poco tiempo, analiza la educación actual que muchos padres están proporcionando a los jóvenes. Según la autora de esta misiva anónima y sin un destinatario concreto, darle a nuestros hijos «todo lo que yo no he tenido» no implica solo malcriarlos sino también «deformar la realidad de sus vidas».
«A mí me vale lo de cuando seas padres comerás huevos», apunta la redactora a propósito de una realidad que examina sin reparos. «Niñatos de 10 años con móviles de 600 pavos, crías de 15 con extensiones de pelo de 500 euros, imberbes de 18 años con cochazos de 24.000…» y así una larga lista que invita al lector a reflexionar sobre el valor del esfuerzo y el sacrificio.
«Le damos la libertad de decidir que no tuvimos, le damos estudios que no tuvimos, vacaciones que no tuvimos y muchas más cosas que nosotros solo pudimos soñar. Esa es la buena educación» resume la autora de esta carta que pasado por miles de manos en muy poco tiempo.
La encargada de hacerla rodar fue una usuaria de Facebook que acompañó la ya famosa fotografía del siguiente mensaje: «Esta es la realidad… esperando en la consulta del médico me encuentro con esta reflexión». Y no tardaron en sumarse las voces a favor.