Las prendas blancas son un básico infalible: son lindas, elegantes y prácticas. El problema es que resulta muy difícil mantenerlas impecables y lograr que el color se mantenga inmaculado por mucho tiempo. Cualquier roce o mancha, por pequeña que sea, se nota muchísimo. Aquí, cómo blanquear la ropa blanca paso a paso.
Aunque seamos cuidadosos, al poco tiempo de usarla la ropa blanca puede tomar un color amarillento que la hará parecer sucia o dañada. Te contamos cómo prevenirlo y cómo blanquear ropa amarillenta y devolverle a tus prendas su color original.
Secretos para blanquear ropa blanca en casa y con ingredientes fáciles de conseguir.
Antes de compartir algunos trucos sobre cómo devolverle el blanco a tus prendas, te dejamos algunos tips sobre cómo evitar que la ropa blanca se ponga amarilla:
Un punto importante a tener en cuenta es que no deberíamos esperar a que la ropa blanca se ponga amarilla para cuidar su color. Cada tanto podés poner en práctica algunos tips para su buen mantenimiento.
Podés leer: Cómo doblar toallas para que queden suaves y prolijas
No hace falta gastar mucho dinero en productos caros y difíciles de conseguir. Seguramente en casa podés encontrar todo lo que necesitás para despedirte definitivamente de la ropa blanca amarillenta.
¿Cómo blanquear la ropa sin utilizar cloro? Muy fácil siguiendo algunos trucos:
Para tratar manchas puntuales, mezclá bicarbonato con jugo de limón y aplicalo directamente sobre la mancha.
También podés leer: Cómo usar un lavarropas automático
Para desteñir tu ropa manchada, solo tendrás que meter tu ropa dañada en un recipiente con agua, sal y hielo. Basta con cubrir por completo la prenda con hielo y sacarla al cabo de unos minutos.
Un punto importante para tener en cuenta: para blanquear un delantal o guardapolvo nunca hay que usar cloro o lavandina. Hay que utilizar productos blanqueadores confiables, que el mercado ofrece en gran variedad de marcas y con distintas formas de aplicación.
Una buena opción casera es enjabonar la prenda con el jabón blanco de pan y, sin enjuagar, colgar el guardapolvo al sol. Una vez que esté seco, lavarlo de manera habitual en el lavarropas.
También podés leer: Cómo lavar la ropa de bebé: trucos y consejos
Es muy típico que las camisas se manchen o percudan en las zonas del cuello y de los puños. Con el tiempo y los lavados, es inevitable que las camisas blancas se vayan tornando amarillentas. Te contamos cómo blanquear una camisa blanca de algodón.
En un recipiente grande mezclá agua y detergente o jabón neutro. Revolvé bien y agregá un puñado de sal fina y el jugo de 2 limones. Remojá la camisa durante media hora. Frotá bien, especialmente en las zonas más dañadas, y finalmente lavala como de costumbre.
Si querés reforzar el lavado en el lavarropas, podés agregar un producto blanqueador de ropa. Hay buenas opciones de marcas reconocidas.
También podés leer: Cuál es el mejor lavarropas: claves para elegir bien
Las medias sufren un gran desgaste y cuesta sacar la suciedad porque se adhiere mucho a la tela. Usando limón, bicarbonato y/o agua oxigenada podés recuperar su color sin usar químicos. Si no hay alérgicos o pieles sensibles en la familia, los productos blanqueadores son una gran alternativa para alargar su vida útil.
A veces la ropa no se arruina con el uso sino con el agua que usamos para lavarla. Si es muy dura o tiene sarro o algunos metales, puede generar que tu ropa adquiera un color amarillento. Si es tu caso, lo ideal es recurrir a un ablandador de agua. Podés leer: Sarro en el agua: cómo eliminarlo y evitar que aparezca.
Seguí leyendo:
Utilizamos cookies de terceros para mostrar publicidad relacionada con tus preferencias. Si continúas navegando consideramos que acepta el uso de cookies. Puede obtener más información en:
Politica de Privacidad