Los quemadores de carbohidratos y grasas están de moda y más de una vez escuchamos hablar de suplementos dietarios para ayudar a bajar de peso. Te contamos qué es la faseolamina, cómo actúa y cuáles son las recomendaciones para usarlo sin riesgo.
La faseolamina es una proteína que bloquea los hidratos de carbonos y ayuda a controlar el peso. Es una buen aliada para bajar de peso porque disminuye la absorción de carbohidratos complejos
En esta nota te contamos:
La faseolamina es una proteína bioactiva que se usa como complemento en los planes para controlar el peso. Es una sustancia natural, que proviene del extracto de las judías blancas o frijoles blancos, y tiene la propiedad de inhibir la enzima alfa-amilasa, con lo cual actúa sobre la digestión y disminuye la absorción de carbohidratos complejos.
¿Qué son los carbohidratos complejos? Son nutrientes energéticos con muchas calorías y se encuentran de manera abundante en alimentos como cereales (arroz, trigo, maíz), productos derivados (pan, pasta), papas o legumbres.
Muchos se preguntan qué contiene el Satial Food y otros productos bloqueadores de carbohidratos. Justamente, la base de estos suplementos para controlar el peso es la faseolamina.
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Entrar en detalles médicos puede resultar difícil, pero básicamente es importante entender de qué manera la faseolamina actúa en el organismo para reducir las calorías de algunos alimentos. El mecanismo de acción de esta sustancia consiste en inhibir la enzima alfa-amilasa producida por el páncreas, que es liberada al intestino delgado cuando ingerimos alimentos.
El mecanismo de acción de la faseolamina consiste en inhibir la enzima que digiere el almidón, implicada en la digestión de los carbohidratos complejos
Lo que hace la enzima alfa-amilasa es transformar el almidón para convertirlo en glucosa y, de esa manera, lograr que atraviese la barrera intestinal hasta llegar al torrente sanguíneo. Al bloquear este proceso, la faseolamina hace que los carbohidratos ingeridos no sean absorbidos, con lo cual también impide que concreten su aporte calórico.
Entre sus indicaciones, se recomienda para quienes realizan un alto consumo de alimentos como el pan, la pasta o la patata, ricos en carbohidratos complejos, es decir, en almidón.
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Es importante entender que cada cuerpo tiene sus particularidades y hay diferencias personales en cómo actúa la faseolamina. Distintos estudios e investigaciones sobre la absorción de harinas y almidones revelan que esta sustancia reduce la absorción de las calorías de los carbohidratos complejos, pero los resultados varían en cada organismo.
Además, hay otros factores que intervienen: son determinantes los hábitos, el tipo de alimentación, el nivel de actividad y el estilo de vida.
Los nutricionistas recomiendan que, para que la faseolamina logre el efecto esperado, debe estar acompañada de una dieta equilibrada y variada, en la que no haya excesos de alimentos ricos en carbohidratos complejos.
Si consumimos esta proteína pero, a la par, ingerimos muchos alimentos con alto nivel de carbohidratos, no notarás efectos sobre el peso. Tiene que ser una aliada más en un proceso de hábitos alimenticios saludables, que limiten la presencia de alimentos grasos, con mucho almidón y calorías.
En el mercado podés encontrar suplementos con faseolamina, promocionados para bloquear la absorción de carbohidratos complejos en la pasta, el arroz, los cereales, las legumbres o las papas, entre otros alimentos
Algunos estudios afirman que la faseolamina reduce las calorías que proceden del almidón hasta en un 66%, pero si no reducís el consumo de estos alimentos, el resultado no será el esperado.
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Sí, es natural. Como dijimos, el origen de esta sustancia se encuentra en las vainas de las judías blancas o frijoles blancos. Se obtiene el extracto después de un complejo proceso de molienda, drenaje, filtrado, concentración al vacío, pasteurizado y secado.
Los estudios publicados hasta el momento refieren una buena tolerancia, aunque algunas personas han tenido un exceso de gases.
Se ha probado que la dosis recomendada para obtener buenos resultados oscila entre 500 y 1500 miligramos antes de la ingesta de alimentos ricos en almidón.
Los nutricionistas advierten que lo más saludable es moderar la ingesta de estos carbohidratos antes de recurrir a estos suplementos, sobre todo porque este tipo de productos puede inducir la idea equivocada de que puedes comer cualquier cosa y ya no importa el resto de la dieta.
En dosis estudiadas, estos suplementos son seguros en la mayoría de los individuos, pero los médicos subrayan que se debe tener precaución o no se recomienda su uso en mujeres embarazadas o en período de lactancia, y niños o pacientes con trastornos hepáticos o renales, debido a la falta de información de seguridad establecida. También deben evitarlo las personas que usan otros agentes para bajar de peso o personas diabéticas que usan agentes hipoglucemiantes, debido a potenciales efectos aditivos (hipoglicemias).
Es importante entender que la faseolamina no actúa sobre las grasas: su actuación se limita a las calorías presentes en los alimentos ricos en hidratos de carbono.
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