Sabores

Receta de bavaroise de durazno: paso a paso

Se trata de un postre muy suave y frío hecho principalmente con gelatina y mouse. En este caso, te contamos cómo es la receta de bavaroise de durazno en simples pasos y sin horno.

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El bavaroise no es un postre muy típico que se puede llegar a escuchar en una cafetería, aunque en aquellas con menús variados puede que sí. La receta de bavaroise de durazno no es tan complicado como aparenta ser. Conoce qué ingredientes se necesitan y cuál es el procedimiento para poder obtener este fresco postre.

Receta de bavaroise de durazno

La receta de bavaroise de durazno es una alternativa ideal para llevar y sorprender con algo rico en una reunión de trabajo, en un cumpleaños o mismo en un simple tarde de té entre amigos. Sobre todo si es en la época de verano, ya que este postre se destaca por su frescura y por su falta de horno en la preparación.

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El bavaroise en sí es un postre cremoso con origen en Alemania y Francia y que, como ya mencionamos, se sirve frío. Por lo general la receta conlleva gelatina y un mouse, pero además pueden usar diferentes variables de sabores para ir combinando.

En ese sentido, el bavaroise es dulce y puede tener un sabor a vainilla, chocolate, café o incluso de frutas. Para esta nota, presentamos la receta de bavaroise de durazno para darle ese toque fresco, sano y dulce característico de esta fruta.

Ingredientes para el bavaroise de durazno

Los ingredientes que se requieren para preparar este cremoso postre son los siguientes:

  • 500 cm³ de crema de leche
  • 100 gr de azúcar impalpable
  • 14 gr de gelatina sin sabor (2 sobres)
  • 1 lata de durazno en almíbar
  • 1 copita de licor de durazno

Cómo hacer bavaroise de durazno

La receta de bavaroise de durazno no lleva horno en su preparación, por eso es un proceso bastante sencillo y que además no lleva mucho tiempo. A continuación, mencionamos el paso a paso de este cremoso postre.

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  1. Apartar de la lata tres mitades y un cuarto de durazno y separarlas para utilizar más tardes.
  2. Procesar el resto de los duraznos de la lata con un mix o procesador.
  3. Cubrir el interior del molde con acetato y colocar por encima tres mitades de durazno (de los que se habían separado en un principio).
  4. Batir a medio punto (es decir, sin llegar al chantillí) en un bowl la crema de leche, el azúcar impalpable y el licor de durazno.
  5. Añadir la pulpa de durazno y hacer que se integre bien.
  6. Hidratar la gelatina con agua y luego diluirla a baño María con cuatro cucharadas soperas de almíbar de los duraznos.

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  1. Agregar la gelatina a la mezcla.
  2. Verter la preparación en el molde cuidadosamente, para que los duraznos del fondo no se salgan de lugar.
  3. Cubrir el molde con papel film y llevarlo al freezer por 3 o 4 horas (o bien dejarlo en la heladera por un día entero).
  4. Retirar el postre del molde y sacarle el acetato.
  5. Para la decoración se puede utilizar el cuarto de durazno apartado del principio y distribuirlo por encima del postre. También puede estar acompañado de crema chantillí dispersa en copos con una manga pastelera.

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