Destino España: emigrar sin ciudadanía, con pasaporte argentino y contrato de trabajo

Guille Montiel es argentino. Vivía en Carmen de Patagones y emigró a Salamanca. Comparte su experiencia para ayudar y orientar a quienes amasen sueños parecidos.

Hola. Vengo a dejar mi experiencia de cómo pude emigrar, teniendo solamente pasaporte argentino. Es decir, sin ciudadanía europea. Soy del interior del país, de una ciudad muy pequeña: Carmen de Patagones.

Soy programador (sistemas). En marzo comencé a buscar un nuevo trabajo, ya que en la empresa donde estaba sentía que no estaba avanzando. Realicé muchas entrevistas para trabajar en Argentina con trabajo remoto. Al ver que me empezaba a desenvolver bien en las entrevistas, decidí probar suerte en las empresas de España.

Arme un curriculum específico, en el que aclaraba desde el inicio que mi intención era irme a vivir a España. Muchos me rechazaron, diciendo que ellos no gestionaban la visa.

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A mediados de abril pude dar con una empresa que estaba buscando un programador. Ellos queríaan a alguien que que vea trabajando dentro de la empresa durante mucho tiempo.

Les conté mi situación y mis planes de irme. Les agradó lo que exponía y me prometieron llamarme para contarme su decisión. Con muchos nervios esperé la llamada e increíblemente la recibí a los 2 días de haber hecho la entrevista. Me dijeron que querían trabajar conmigo y que iban a hacer todos los papeles para que pudiera viajar a España.

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Así empezó la odisea.

Primer problema. No tenía pasaporte. Por más increíble que resulte, nunca había sacado el pasaporte. En mi defensa puedo decir que jamás creí que iba a conseguir un trabajo tan rápido.

La empresa lo necesitaba ya, así que fui al Registro Civil y me dijeron que el trámite de pasaporte tardaba hasta ¡¡¡2 meses!!! ¿Cuál fue la solución? Viajar más de mil kilómetros, hasta el aeropuerto internacional de Rosario, para hacerme un “pasaporte al instante”. Pague 18500 pesos y me lo entregaron a las 2 horas.

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Segundo tema. Mi pareja y mi hija. No sabíamos qué visa me iban a dar, pero de ser la de personal “altamente cualificado” podíamos irnos los 3 juntos. ¿Cuál era el tema? Que teníamos que hacer los papeles de convivencia/concubinato y, eso, nos dijeron, luego complicaría los trámites. La solución: me casé ese mismo mes.

Saqué el pasaporte para mi hija en el registro (30 días tardó). Y tuvimos que hacer el pasaporte para mi esposa en el consulado de Chile (otro viaje más).

Papeles que entregué a la empresa.
– Fotos del pasaporte (todas las hojas).
– Foto del DNI.
– Foto de mi título universitario (técnico en programación).
– Certificado de antecedentes con la apostilla de la Haya.

Ellos comenzaron los trámites en extranjería. Les dijeron que para este caso debían dirigirse a la oficina de empleo de Salamanca y colocar de forma pública el trabajo que me ofrecieron para que se anoten los españoles. Debían tomar entrevista y luego justificar por qué las personas no cumplían con los requisitos. Pasaron la semana y se presentaron muy pocos. Llevaron el justificante y la oficina de empleo la avaló.
Con ese papel ya podían empezar.

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Me asignaron un NIE y el trámite salió favorable un mes después… ¿La mala noticia? Es una Visa de trabajo “normal”. Mi esposa y mi hija no pueden venir conmigo hasta que se cumpla un año y me renueven la Visa. En ese momento puedo pedir la reagrupación familiar.

Ya habíamos evaluado esa situación, pero aún así teníamos la esperanza de venir los 3 a España. Una vez que recibí la notificación de que la Visa salió favorable era hora de empezar yo lo trámites.

Lo primero que hice esa mañana fue renunciar a mi trabajo. Después pedí turno al consulado de España en Bahía Blanca. Me pedían la documentación y que avise cuando tuviera todo para que ellos me dieran turno.

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Documentación para el Consulado.
– Pasaporte (original y copia solo de las 2 primeras hojas)
– Certificado de buena salud con la apostilla de la haya
– Fotos tipo carnet con fondo blanco
– Formulario de solicitud de visado
– Resolución favorable de extranjeria en España.

Una vez que junté todos los papeles, me asignaron un turno para la semana siguiente. Viajé hasta Bahía y entregué todo. Pagué 6.500 pesos por la Visa.

En una semana me llamaron para avisarme que podía retirar mi pasaporte con el visado. Me preguntaron la fecha en la que iba a entrar a España. Les dije el 31 de agosto, ya que el vuelo era para esa fecha. Le colocaron el 31 como inicio de Visa.
Envié un comisionista a retirar mi pasaporte.

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El viaje

Con todo listo ya solo quedaba sacar el pasaje. Compré en Iberia. Desde Ezeiza a Madrid para el 30 de agosto. 11.5000 pesos + 13.500 pesos de una maleta extra. Saqué un pasaje en micro desde mi localidad hasta buenos Aires: 6.000 pesos.

Unos días antes de la fecha de salida, Iberia me cambia la fecha de vuelo. Para salir el día 28 de agosto. Muchisima bronca, ya que no podía entrar a España antes del 31 de agosto. Cambié esa fecha (sin costo) y puse para viajar el 1 de septiembre. Perdí el pasaje de micro ya que no me devolvieron nada.

Viajé en auto con mi familia hasta el aeropuerto de Ezeiza. Toda la noche viajando para poder llegar en la mañana y hacerme el PCR. Otro problema: me dijeron que el resultado no iba a estar listo para el abordaje.

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Como loco, fui a preguntar a Iberia qué podía hacer y me dijeron que me haga los dos. Con el de antígeno, hago el QR de España y el PCR me lo envían al email y lo tengo para cuando aterrice. Me salió 10.000 pesos.

En Ezeiza presenté:
– QR con la aplicación.
– Declaración jurada impresa (ni la leyeron).
– Y pasaporte con el visado.

Llevé 3 maletas. Una grande, mediana y pequeña (venían así, en un combo). El check in lo hice mientras viajaba hacia el aeropuerto y me senté al lado de la ventana. Viajé solo así que pude estirar bien las piernas. ¡Primera vez que volaba!

Llegué a Madrid. El avión aterrizó media hora antes. Sin conocer nada, traté de guiarme para ver dónde se recogía el equipaje. Por suerte lo encontré. ¡El aeropuerto me pareció enorme!

Pasé por migración y mostré mi pasaporte. Antes de retirar la maleta te exigen que muestre el QR con la aplicación. Una vez que lo mostré me pidieron el resultado del PCR. Lo tenía en el email pero el wifi del aeropuerto no me lo descargaba. Me puse muy nervioso. La chica que me atendió comprendió lo que pasaba y me dijo que no me preocupara. Igualmente tenía que hacerme nuevamente un test de antígeno, ya que provenía de Argentina (no sabía esto). Me llevaron a otro lugar y me hicieron otro test. Salió negativo y me dejaron ir a buscar mis maletas.

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Otro tema: tenía que viajar a Salamanca. Desde la empresa me sacaron un pasaje en tren. Yo, sin conocer nada, me tenía que mover desde el aeropuerto hasta la estación de tren. Me tomé un taxi y pagué con la tarjeta visa de Argentina 30 euros. Me dolió hasta el alma.

Llegué a la estación de tren con tiempo y me comuniqué con mi familia. A las 8:50 tomé el tren y llegué a las 10 am a Salamanca donde me esperaban para llevarme al hotel.

Hoy estoy acá. Escribiendo desde el hotel en Salamanca. Extrañando mucho a mi esposa y a mi hija, pero aguantando porque esto comenzó con la idea de darle algo mejor a mi familia. Y por suerte estoy cumpliendo ese sueño. Solo resta aguantar y esperar que pase el año para volver a sentir sus abrazos.

Gracias por leer mi historia. Ánimo y buenas vibras para todos.
Saludos desde Salamanca.

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