Nuestra país tiene una fusión gastronómica muy enriquecida por la mezcla de ingredientes y recetas traídas por los inmigrantes, más las comidas típicas de los pueblos originarios que ya habitaban esta región. Una de tantas recetas bien recibidas y que se convirtió en uno de los platos favoritos de los argentinos es la milanesa con papas fritas. Seguro que habitualmente las preparás, pero hoy te vamos a contar cómo hacer milanesa fácil, deliciosa y utilizando diferentes tipos de carnes y de cocción.
¿Quién no desea llegar a casa y encontrarse que lo esperan con una fuente rebosante de milanesas con papas fritas? Por eso hoy desde Casa y Sabores te acercamos algunos consejos y secretos aprender cómo preparar una milanesa perfecta y deliciosa.
Las podemos preparar de carne vacuna, de pollo, de pescado, de cerdo, por supuesto para los que optan por las comidas vegetarianas hay muchísima variedad de milanesas de verduras, pero hoy vamos a contarte recetas de milanesas de diferentes carnes.
1) Elegir el tipo de carne
Tradicionalmente, la milanesa se hace con carne vacuna, se pueden utilizar diferentes cortes como peceto, nalga, bola de lomo o cuadrada, en esto depende tu gusto, ya que algunos cortes con más jugosos y otros más secos. También al momento de decidir influye el costo ya que difieren mucho entre ellos. Pero con todos los cortes de carne vacuna te saldrán unas milanesas deliciosas.
Como consejo te podemos decir que la nalga es el corte ideal para unas milanesas especiales, jugosas por dentro y con un buen apanado crujientes por fuera. Algunos utilizan una técnica para tiernizar la carne que consiste en golpear sobre la mesada la carne con una masa de madera. Pero si elegís nalga no necesitás hacer este paso.
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2) Preparar el adobo
El adobo clásico para macerar la carne para milanesas se prepara batiendo huevos con perejil fresco y ajo picado. Dejá descansar los bifes de carnes dentro de la mezcla por al menos media hora adentro de la heladera.
Si querés hacer otra versión más gourmet podés agregarle también 2 cucharadas soperas de queso rallado, una cucharada de mostaza y un chorro de vino blanco. Por supuesto esto a tu elección pero te aconsejo que un día pruebes este adobo especial para tus milanesas.
3) Rebosar o apanar la carne
En una fuente amplia poné buena cantidad de harina común y en otra bandeja poné también bastante pan rallado. Para empezar retirá cada pieza de carne y pasala por la harina, de ambos lados, luego las volvés a pasar por la mezcla de huevos y por último las rebosas con pan rallado, dando varios golpes con las manos para que se pegue bien el pan.
Para el apanado podés usar solo pan rallado, o mezclarlo con avena, o utilizar panco. Todo queda delicioso, pero depende que utilices te quedarán más o menos crocantes y eso va en gusto de cada uno.
Si no pasás la carne por harina, podés hacer un doble apanado con el rebozador. Es decir luego de apanar la carne, la volvés a incorporar en la mezcla de huevos y la apanás por segunda vez. A muchas personas les gusta que tenga abundante pan, pero en ese caso te aconsejamos que la carne no esté cortada demasiado fina, sino resultará demasiado pan y poca carne.
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5) Cocción: ¿frita o al horno?
Acá podríamos decir que las preferencias están muy divididas, si bien el clásico es hacerlas fritas, muchas personas que no quieren privarse de este plato tan rico y las cocina al horno para hacerlas un poco más saludables. También podés conocer los distintos tipos de cocción de las comidas.
Fritas: si las hacés fritas asegurate de usar una sartén profunda porque para que absorban menos aceite debés hacer una cocción con abundante aceite, ya que mientras menos aceite tenga la sartén donde se fríen las milanesas, más aceite absorberan. Además debe estar bien caliente. Una vez bien doradas, las retirás y las colocás en un plato con papel absorbente de cocina para quitarles el excedente de aceite.
Al horno: un tips importante es encender el horno para precalentarlo y poner la asadera untada en aceite para que se caliente bien la fuente y las milanesas no se peguen. Cocinalas de ambos lados por unos minutos y verificá el punto de cocción cortando una. Recordá que las carnes deben comerse cocidas.
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Ahora que ya sabés el paso a paso para saber cómo hacer una milanesa, te contamos a continuación con qué otros tipos de carne podés prepararlas y que adobo le marida mejor a cada una. Con respecto al rebosado y al tipo de cocción te manejás con los consejos que te dimos anteriormente.
Como te contamos antes, te sugerimos elegir el corte vacuno de nalga. Pero también podés optar por los otro cortes mencionados. Procedé según los pasos del 1 al 5 y te aseguro que te saldrán unas milanesas deliciosas, crujientes y tiernas a la vez. Acompañalas con papas fritas que es el clásico para los chicos, también quedan riquísimas con puré de papa, papas al horno o unas ricas ensaladas, con vegetales variados y coloridos.
Esta es la otra opción más común que cocinamos habitualmente porque es un menú rápido y que a los chicos también les gusta mucho.
La pieza ideal de pollo para hacer milanesas es la pechuga, que podés comprar en la granja directamente fileteada listas para preparar. O podés comprar las supremas de pollo y con un cuchillito bien afilado podés sacar de cada suprema 3 churrasquitos.
Si querés unas milanesas de pollo más jugosas, podés utilizar el muslo y la pata, acá si sabés deshuesar el pollo lo hacés vos y formás los churrasquitos, sino podés pedirle a tu amigo carnicero o de la granja que te venda los churrasquitos de pata y muslo cortados.
Adobo para las milanesas de pollo: el maridaje perfecto para el pollo es una mezcla de huevos, sal. pimienta y orégano.
Otra opción: es la mezcla de huevos, sal, pimienta, tomillo fresco y 1 cucharada de mostaza.
La guarnición puede ser igual que para las milanesas de carne, pero también podés acompañarlo con un arroz blanco o arroz aromático. Queda muy bien con el pollo.
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Otro clásico indiscutido es la milanesa a la napolitana. Puede ser de carne o pollo, pero todo el sabor se lo tenés que dar con una buena salsa pomodoro o con tomates frescos en rodajas y un buen queso o muzzarella. Ahora te pasamos la receta nuestra.
Cocinás las milanesas como siempre, sólo no dejes que se doren, ya que luego irán al horno por un rato con la salsa y el queso para gratinar, si las cocinas demasiado van a quedar muy secas.
Opción 1: Prepara una salsa cruda, mezclando en un bowl puré de tomate, pulpa o tomate de lata cubeteado, agregale sal, una cucharadita de azúcar, orégano y aceite de oliva. Lo mezclás bien y tenés lista la salsita para ponerle arriba de cada milanesa con unos cubos de queso y al horno para que se gratine. Si querés podés calentar la salsita unos minutos en el microondas.
Opción 2: Lavá bien 2 o 3 tomates frescos redondos o peritas, cortalos en rodajas y condimentalos con sal, orégano fresco, aceite de oliva y 1 cucharada generosa de ajo fresco rallado. Esta salsita es muy deliciosa y si no te gusta el ajo no lo pongas y quizás podés saborizar con mezcla de especias para pizza.
Para acompañar, solo un puré de papa o mixto con calabaza o una fresca ensalada.
Para hacer estas riquísimas milanesas de cerdo, el corte más adecuado es el lomo cortado en filets. También puede utilizarse el muslo o paleta, previamente deshuesadas y cada bife tenés que aplanarlo un poco con la masa de cocina para que quede bien armado el filet.
La preparación y cocción es igual para las otras carnes. Pero te vamos a contar qué adobo le combina mejor y qué guarnición.
Adobo 1: Mezcla de 5 huevos, sal y pimienta blanca a gusto, Mostaza de Dijón 1 cucharada generosa, 2 dientes de ajo picado. Este adobo queda muy delicioso.
Adobo 2: mezcla de huevos, sal y pimienta negra, salsa ketchup 1 cucharada generosa, pimentón dulce 1 cucharada y orégano a gusto.
Para las milanesas de cerdo, el mejor acompañamiento es la batata, porque es dulce y combina bien con la carne de cerdo, podés hacerlas en puré, fritas o al horno.
También podés hacer un puré de zanahoria condimentado con tomillo. O hacer las zanahorias al vapor o asadas.
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¡Esperamos que te gusten estas recetas, las pruebes en casa y te salgan riquísimas!
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